KEEP CALM AND QUILTING

Ya os he hablado de mi perro Io, El Impaciente Inglés.

Le gusta la hora del té como a mí, pero hay otra cosa en la que nos parecemos: a los dos nos  gusta el acolchado de un nuevo quilt. 

Me gusta acolchar a mano, ni siquiera he intentado hacerlo a máquina porque me perdería una de las tareas mas relajantes en la elaboración de un quilt y él me acompaña siempre.

Sólo hay que dejar que la aguja se mueva rítmicamente arriba y abajo entre los tres tejidos, siguiendo el diseño elegido. 

Permitiendo que la mente encuentre sosiego, vagabundeando por los pensamientos


Él enseguida se acomodará entre sus pliegues.

 

No se puede estar más relajado.

Y es que... ¿quién se puede resistir a un cálido quilt y a un reconfortante rayo de sol?.

TU Y YO ESTAMOS HECHOS DE PATCHWORK

Todos estamos hechos de Patchwork, de pequeños trozos de recuerdos de personas, de experiencias, de momentos y situaciones, que han ido uniéndose para configurar lo que somos, a modo de un gran quilt en permanente estado de construcción, único e irrepetible.

Me agrada guardar los recuerdos en tela. Lo más convencional es hacerlo en fotos o videos, pero lo mío son los tejidos.

Disfruto dibujando y cosiendo en tela elementos que tengan relación con personas, lugares o cosas que sean importantes en mi vida o en la vida de las personas para las que les coso algún quilt.

Este quilt lo hice hace 8 años y guarda imágenes que forman parte de mi vida.Está hecho todo a mano con las técnicas de patchwork y aplicado

El árbol de la vida

Pinos y hojas de La Garganta, nuestro añorado pueblo en Extremadura

Mi deseada casa en el campo

Nuestra familia

Nuestro perro Io y un recuerdo a nuestra perra Luna

Un trisquel asturiano

Mi mejor obra

Acolchado del borde

Me gustaría pensar que el calor acogedor de los quilts, pueda pasar a otras generaciones. Dentro de ellos llevan las conexiones a nuestro pasado personal.